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jueves, 31 de enero de 2013

la coca del Chapare no consume nadie. el 98% de su producción va para la cocaína. el estudio pagado por UE muestra el extremo que Evo no quiere presentar. quinto reclamo de su Embajador


La Unión Europea, a través de su embajador en Bolivia, Timothy Torlot, le exigió al gobierno de Bolivia que publique el informe del estudio integral de la hoja de coca que fue subvencionada económica por los países que componen la comunidad.
El ex zar antidroga del país, Ernesto Justiniano, fue entrevistado por Fides en torno a la importancia que tiene este informe.
P.- ¿Cómo tendremos que interpretar como país las declaraciones del representante de la instancia que financió económicamente el estudio sobre la hoja de coca, particularmente en la visión que se ha estado manejando la coca como una bandera tras la decisión de la ONU de despenalizar el acullico?
Ernesto habló para Fides y otros medios hace algunas horas.
Justiniano: “El estudio de la hoja de coca se definió el año 2002 cuando en las negociaciones entre Gonzalo Sánchez de Lozada y Evo Morales en Cochabamba se trataba de definir una política hacia adelante en la lucha contra el narcotráfico, y obviamente la coca era importante en esta decisión. Uno de los puntos de acuerdo fue hacer un estudio de mercado para conocer con claridad cuánta hoja de coca iba al narcotráfico y cuánta estaba destinada al acullico, en función de ese resultado activar los mecanismos en la lucha antidroga. Lamentablemente, en ese momento no se pudo aplicar ese punto porque una de las condiciones del MAS y de Evo Morales, como presidente de la Federación de Cocaleros del Trópico, era justamente parar la erradicación, cosa que ni siquiera se ha dado en la gestión de Evo Morales en los 7 años que está gobernando.
El tema del estudio de mercado de la hoja de coca era, y debiera ser además, una política (de Estado) a seguirse periódicamente. El año 1988 cuando se hizo la Ley 1.008 esta norma contemplaba como parte fundamental realizar un estudio periódico para saber cuánta hoja de coca iba al acullico.
Desde el año 2006 en adelante, el gobierno de Evo Morales fija una política de aumento de la producción de coca a 20.000 hectáreas más, de las 12.000 vigentes por Ley, y lo hace solamente con una resolución multiministerial en contra de la vigente Ley 1.008, y es aquí donde se quebranta la ley y sin hacer un estudio técnico de mercado.
El gobierno ha tenido bastante tiempo como para realizar el estudio de mercado. Hizo la tarea de pedir un soporte económico a la Unión Europea, la UE entregó ese dinero y la última noticia que se conoce, hace dos semanas atrás, es que el estudio de mercado no se había dado a conocer porque se estaba haciendo un “reacomodo” para contemplar la coca que va a la Argentina mediante la exportación. En este punto, estoy convencido de que el gobierno, a través del funcionario que emitió ese comunicado, cometió un improperio contra la ley, toda vez que Bolivia ahora es signataria de la Convención de Viena que permite el acullico pero prohíbe la exportación de la hoja de coca. Ese es un tema técnico que no lo van a poder realizar.
Considero que esa es la razón de la insistencia de la Unión Europea para que el gobierno haga público el estudio, porque además de estar invirtiendo una cantidad considerable de dinero, como el que se ha prestado a Bolivia, pasa por una decisión como país para llevar adelante una verdadera lucha contra el narcotráfico y por conocer cuánto de la producción se va a la cocaína y cuánto se destina al acullico.
El gobierno estadística ni científicamente puede comprobar que se necesita más coca para el acullico del que seguramente ha arrojado el estudio. Estoy seguro que si el número hubiera salido de 20 0 25 mil hectáreas hace tiempo ya hubieran publicado, pero como la cantidad es diferente no lo publican porque les ocasionará un problema político. Un claro ejemplo es el de los cocaleros de los Yungas, puesto que si se determina incrementar la cantidad de producción, que van a exigir por tradición y por Ley que esa cantidad incrementada de coca vaya justamente a esa región y no al Chapare, porque los Yungas han sufrido un deterioro en la capacidad de producción y porque además, como es conocido por la opinión pública, un 95% en promedio en los últimos 10 años de la producción de coca del Chapare se ha ido al narcotráfico”.
P.- El viceministro de Defensa Social señalaba que se están realizando tres estudios complementarios a la hoja de coca para responsablemente entregar un informe más detallado y real a la UE. ¿Qué tan importante es que Bolivia, a través de sus gobernantes, asuma con responsabilidad este tema?
Justiniano: “Es vital, no solamente para el resto del mundo sino para todos los bolivianos también, no nos olvidemos que en el país se produce coca para la cocaína; es vital para la lucha contra el narcotráfico, porque desde el momento en que se conozca cuánta coca se va para el acullico se va saber cuántas hectáreas se van hacia el narcotráfico. Y este sería el punto de partida para decir que así como se nacionalizó Yacimientos con el tema del gas, nacionalicemos también la producción de la hoja de coca, y no dejar a la “empresa privada” o al libre albedrio la producción de coca donde es muy difícil controlarla.
En la incertidumbre, los que salen ganando con esa situación difusa de saber cuánto se va para el acullico y cuánto se va para la cocaína, yo pienso que los que están ganando son los narcotraficantes.
El estudio se debió hacer máximo en un año. Creo que el problema es político porque quien va a perder es el Chapare, debiera perder el Chapare, si el estudio se hizo como correspondía. Un ejemplo es el informe sobre monitoreo de cultivos de coca que sale anualmente y donde con claridad se observa que el 90 o 95% de la coca del Chapare se va la narcotráfico. Y en esta situación es el narcotraficante es el que gana.
No hay una decisión política, porque hay que definir un número, y el mensaje de la comunidad internacional, a través de la Unión Europea, es que no se puede seguir esperando y exige la publicación de los resultados del estudio.
Han pasado 11 años desde que definimos en conjunto con la gente del MAS con claridad realizar el estudio de mercado, pese al tiempo transcurrido ese resultado no se ha dado a conocer. Y ahora, tras 7 años en la gestión de gobierno, no hay excusa para decir no se hizo”.
El ex zar antidroga Ernesto Justiniano, con conocimiento de causa, recordó que el estudio integral de la hoja de coca nació en acuerdo con el entonces líder de los cocaleros y diputado Evo Morales Ayma. (El Gobierno) No tiene justificativo para no entregar el estudio integral de la hoja de coca, tuvieron 7 años. Don Ernesto Justiniano dice por qué no se publica el estudio cuando empresas grandes la hacen en menos de un año, tal vez la cifra les salió muy chica y tienen de algún modo cambiarle, aguantarla, ¿por qué?, porque esto le va traer problemas políticos con la región que lo vio nacer como líder, como dirigente, el Chapare.
Según Ernesto Justiniano, quien va perder más con este estudio de la coca va a ser el Chapare, si inflan las cifras los Yungas van a exigir que se produzca más coca en su región y no el Chapare porque es evidente que más del 90% de la gente que acullica prefiere la coca yungueña y no la chapareña. ¿Dónde va la coca chapareña? Son las incógnitas, preguntas que nos dio a conocer Ernesto Justiniano como ex zar antidroga.
Radio Fides – Santa Cruz

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