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viernes, 29 de junio de 2012

no están descubriendo la pólvora, antes que Uruguay ya se probó el método en Holanda, Suiza y Dinamarca. legalizar una droga y controlar el consumo entre los drogodependientes con el fin de procurar su rehabilitación. crónica de El Nuevo Heraldo


El gobierno uruguayo envió al Parlamento un proyecto de ley para internar en forma compulsiva a adictos a estupefacientes para preservar su integridad física y salvaguardar la seguridad de la población, informó la Presidencia.
La iniciativa impulsada por el presidente José Mujica —segundo gobernante de izquierda en la historia del país— fue enviada el miércoles en el marco de un paquete de medidas anunciadas la semana pasada, que buscan combatir el incremento de la inseguridad y que incluyen la “legalización controlada” de la marihuana, proyecto que aún no llegó al Parlamento.
El gobierno propone adoptar “medidas y procedimientos tendientes a preservar la integridad física y psíquica —así como procurar la recuperación— de las personas adictas al consumo de sustancias estupefacientes” y “salvaguardar la seguridad y el orden público de la población”.
La propuesta —que ha generado polémica dentro del propio partido de gobierno, el Frente Amplio— “respeta las garantías individuales” de los adictos, resalta el gobierno.
“Queremos (…) tratar de pelear a brazo partido contra el tráfico y consumo de pasta base (pasta básica de cocaína), que es una de las drogas menos consumidas pero tiene efectos inadmisibles”, había indicado el ministro de Defensa, Eleuterio Fernández Huidobro, al presentar el paquete de medidas.
Según una encuesta de la Junta Nacional de Drogas, solo el 1.1 por ciento de la población consume pasta base de cocaína, una droga que es no obstante vinculada con el incremento de la violencia en los delitos.
Otro proyecto presentado el miércoles propone agravar las penas para los delitos de tráfico de pasta base y los casos de corrupción policial, así como para quienes delincan prestando funciones en establecimientos de reclusión.
Según el texto, las penas por tráfico de pasta base serán de cuatro a 15 años de prisión, superiores a las que existen por homicidio simple (de 20 meses a 12 años).
Otros dos proyectos de ley proponen crear un Fondo Nacional de Indemnización a las Víctimas de Delitos Violentos y establecer penas mínimas de un año de reclusión para los adolescentes que cometan delitos graves.
En el último caso, los legisladores del Frente Amplio se opusieron a la intención del gobierno de elevar la pena máxima de cinco a 10 años de encierro.
Entre enero y mayo se registraron 133 homicidios en todo el país, lo que representa un incremento de 70 por ciento con relación al mismo periodo del 2011.
No obstante, con una tasa de 6.1 homicidios cada 100,000 habitantes, el país es uno de los países con menor tasa de homicidios de la región, según el informe del Latinobarómetro 2011 sobre seguridad ciudadana.

miércoles, 27 de junio de 2012

aumentan sembradíos de coca en Bolivia, pese a la erradicación. inocultable informe de ONUDD publicado en Viena.

texto y foto de OPINION
En la ciudad de Viena, Austria, la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (ONUDD) publicó ayer el Informe Mundial sobre las Drogas 2012, donde ratifica el aumento de cultivos de hoja de coca en Bolivia. 

El informe se basa en datos brindados por el "Monitoreo de cultivos de hoja de coca en 2010" realizado por la ONUDD en Bolivia -presentado el 12 de septiembre de 2011-, en el que señala que hasta el 2010 se registraron 31.000 hectáreas de cultivos de coca, lo cual representa un aumento del 0.3 por ciento respecto al 2009, cuando existían 30.900 hectáreas.

De acuerdo al Informe Mundial, publicado en el portal web de la ONUDD, en el cultivo, la producción y el tráfico de cocaína ha "habido una disminución general de la fabricación mundial", impulsado por una importante disminución en la fabricación de cocaína en Colombia en el período de cinco años de 2006 - 2010.

No obstante, se evidencia que "la producción de coca aumentó en el mismo periodo de los otros dos países productores de coca, Bolivia y el Perú, que son cada vez más productores importantes", sostiene el documento. 

En esa línea, indica que a partir de 2006 se "produjo un cambio (en el envío de cocaína) en los mercados europeos", pues desde esa gestión ha sido compensada por cocaína producida en Bolivia, ante la escasez, "al menos parcialmente", de la cocaína colombiana, que tiene como principal mercado Estados Unidos. 

El Informe sostiene que Bolivia continúa como el tercer productor de coca en Sudamérica con 31.000 hectáreas de cultivos de hoja de coca al 2010, el primero es Perú con 61.200 hectáreas de coca y Colombia el segundo con un total de 57.000 hectáreas.

Los tres países suman un total de 149.200 hectáreas de hoja de coca que fueron cultivadas en 2010, cifra inferior a la registrada en 2009, cuando entre los tres países se sumó un total de 158.800 hectáreas de coca. 

Pero el informe señala que este decremento responde a los niveles de cultivos de coca que se redujeron en Colombia, pero que fueron compensadas por el incremento de cultivos de esta planta registrados en Bolivia y Perú. 

"Los datos disponibles sobre el cultivo, la producción y el tráfico indican que la producción mundial de cocaína disminuyó en 2010 de los altos niveles observados en el período 2005-2007. Este es en gran medida un resultado de una disminución en la fabricación de cocaína en Colombia en los cinco años anteriores a 2010. Una discusión de los retos en la estimación de las cantidades de cocaína fabricados se pueden encontrar en el Informe Mundial sobre Drogas 2010 (…) que fue parcialmente compensado por el aumento tanto en Bolivia y el Perú", precisa.

Datos sobre la erradicación de cocales en el país

 En otro de los puntos del informe se incluye además sobre el "reporte de erradicación de coca", donde se evidencia que Bolivia aumentó en sus niveles de erradicación desde el 2006, aunque con una disminución el 2008. Estos son los datos presentados:

2005 - 6.073 hectáreas de coca erradicada

2006 - 5.070 hectáreas de coca erradicada

2007 - 6.269 hectáreas de coca erradicada

2008 - 5.484 hectáreas de coca erradicada

2009 - 6.341 hectáreas de coca erradicada

2010 - 8.200 hectáreas de coca erradicada

2011 - 10.460 hectáreas de coca erradicada

El Informe Mundial sobre las Drogas 2012 fue presentado por el Día internacional de la lucha contra el uso indebido y el tráfico ilícito de drogas, que se celebró ayer. 

sábado, 16 de junio de 2012

bolivia está exportando droga como nunca antes en su historia. lo descubierto hace pocas horas en Chile es otra demostración "de la alta capacidad" organizativa de los mafiosos narcos.

impresionante foto y texto desde Chile cuando se informa del decomiso de 825 kilos de cocaína y marihuana en una tolva que ingresó de Bolivia y que camufló la mercadería prohibida en armaduras de chatarra. causó sensación y la noticia da la vuelta al mundo, poniendo de nuevo en entredicho la capacidad de las autoridades bolivianas para controlar el tráfico que está cusando irreparable daño a la imagen del país y mostrando el poder de las bandas de narcos que operan bajo "el liderazgo" de colombianos, colombianos, peruanos y hasta mexicanos según las denuncias de organismos internacionales que abundan en detalle sobre su nivel de organización, control y derroche de recursos.

miércoles, 13 de junio de 2012

Los Tiempos una vez más advierte de las muy serias consecuencias con el mundo si Bolivia persisten contradicciones en materia de lucha contra el narcotráfico


Las versiones y acciones gubernamentales no resultan convincentes y ese, además de un gravísimo problema interno, afecta también a nuestros vecinos
Hace pocos días, los gobiernos de Bolivia y Colombia, representados por sus respectivos cancilleres, firmaron un convenio de cooperación para combatir el narcotráfico. Lo hicieron dando por entendido que entre ambos hay muchas coincidencias en la materia, pues, además de Perú, son los tres que están más involucrados a lo largo de toda la cadena productiva que va desde los cultivos de coca, pasando por la elaboración y comercialización de cocaína, hasta el lavado del dinero obtenido a través de su inyección en la economía legal.
A lo anterior se suma el temor que provoca la posibilidad de que lo sufrido por Colombia durante las últimas décadas y ahora por México y toda Centroamérica por culpa del desbordado poder de los cárteles de narcotraficantes se reproduzca a escala mucho mayor en un futuro no lejano en el continente sudamericano, lo que ocasiona presiones cada vez más fuertes de los países de la región, y muy especialmente de Brasil y Chile.
La suscripción del convenio bilateral con Colombia, que se suma al suscrito hace poco tiempo con Brasil con el mismo propósito, daría a entender que las gestiones diplomáticas de los últimos años habrían culminado exitosamente al llegar al punto de entendimiento indispensable para la ejecución de políticas comunes.
Tal suposición, sin embargo, parece pecar de optimista y muy precipitada, pues aun antes de que terminara de secarse la tinta con que se firmó el acuerdo bilateral ya comenzaron a proliferar las declaraciones oficiales y oficiosas descalificándolo, restando importancia al problema del narcotráfico y dando a entender que para el Gobierno boliviano no hay nada importante de qué preocuparse en esa materia, puesto que en nuestro país habría sólo uno que otro caso aislado y que el Estado tendría el problema bajo control.
Paradójicamente, y de manera casi simultánea, lo que dio a los hechos el aspecto de un espectáculo mediático más que de una práctica cotidiana, se desarrollaron en diversos puntos del territorio nacional sendos operativos en los que, según los informes oficiales, se erradicaron cientos de hectáreas de cultivos ilegales de coca, se desbarataron decenas de fábricas de cocaína, se desarticularon otras tantas redes de comercializadores de droga, se confiscaron bienes por valor de cientos de millones de dólares, entre otros datos expuestos para exhibir una eficiencia que, según autoridades gubernamentales, superaría con mucho la de otros países.
Sin embargo —lo que constituye toda una paradoja—, las mismas autoridades se empeñan en insistir que tan descomunal aparato productivo, comercial y económico, capaz no sólo de manejar tan enorme negocio y evitar que sus operadores puedan ser detenidos, juzgados y encarcelados, no sería obra de grandes organizaciones —los llamados cárteles—, sino sólo de insignificantes iniciativas individuales.
Más allá de los detalles, lo que es evidente es que las versiones y contradicciones gubernamentales atentan en contra de su verosimilitud y ese, además de un gravísimo problema interno, puede tener serias consecuencias en nuestras relaciones con el mundo exterior.

sábado, 9 de junio de 2012

alerta y llamado contra narcotraficantes contiene el mensaje de la Canciller de Colombia. actúan como acaudaladas empresas de fachada. OPINION. CB.


Canciller colombiana. Ante situaciones tan peligrosas el llamado de la canciller de Colombia es oportuno, y se debe definir acciones para desarrollar un frente común.

En el marco de las últimas plenarias de la 42 Asamblea de la Organización de Estados Americanos (OEA) el pasado martes en la población de Tiquipaya, la canciller de Colombia, María Ángela Holguín, más que una alerta, formuló vehemente llamado a los países miembros para unirse y hacer un frente común contra el narcotráfico.

La canciller Holguín se refirió a la existencia de cárteles colombianos de drogas en Bolivia, precisamente cuando se firmaba un acuerdo antidrogas con su colega David Choquehuanca. Lo expresado por la canciller es un asunto de la mayor gravedad, pues ya no se trata de versiones o de supuestas realidades, a veces negadas por autoridades de la lucha antidroga boliviana, o de evasivas respecto a que no son cárteles sino grupos aislados. Se trata de una información pública de la canciller de un país azotado por las mafias del narcotráfico.

No se puede pasar por alto lo dicho por la canciller de Colombia. La existencia de cárteles del narcotráfico de ese país, no es una cuestión para tomarse a la ligera, o como hasta ahora, que se sabía sobre estos grupos principalmente en el departamento de Santa Cruz, pero que no mereció un informe oficial.

La alerta y llamado al combate contra el narcotráfico de los países miembros de la OEA ha sido completado con la invocación a organizar un frente común de lucha, para destruir a las mafias e impedir que el narcotráfico siga dañando a miles de jóvenes.

Lo dicho por la canciller, también corrobora un informe que hace pocos días publicó el diario El Tiempo de Bogotá en el cual hace conocer la existencia de redes mafiosas colombianas que se extienden por varios países. 

La amenaza para la seguridad regional ha llegado a niveles de profunda preocupación, al punto que la ministra de Seguridad de Argentina, Nilda Garre lanzó un pedido de auxilio a Colombia hace un mes en la Cumbre de Seguridad de la Unasur en Cartagena. En Bolivia se admitió que el narcotráfico superó a las autoridades y que la situación llevó a que se propusiera hacer un censo de colombianos para saber quiénes son delincuentes, según el diario colombiano.

El diario hace referencia a que tuvo acceso a informes de inteligencia que hablan de más de 200 propiedades de la mafia colombiana en varios países vecinos, de condominios, empresas y otros negocios que usan de fachada para exportar droga a Europa y Estados Unidos.

La situación es alarmante y las investigaciones periodísticas coinciden esta vez con versiones oficiales de la canciller de Colombia, que no desperdició el espacio de la Asamblea de la OEA para hacer conocer uno de los problemas más graves que afectan a países de la región y que vienen socavando desde hace años de manera sistemática la seguridad interna y externa de los países afectados con la lacra del narcotráfico.

Ante situaciones tan peligrosas el llamado de la canciller de Colombia no solo es oportuno, se debe definir acciones conjuntas, como las que propone, para desarrollar un frente común que una esfuerzos y estrategias para hacer frente a las bandas del narcotráfico y al crimen organizado. En lo que respecta a Bolivia la aceptación de una situación tan delicada no puede ser soslayada, porque ello está unido a una serie de acciones inmediatas a cargo de instancias policiales correspondientes.

viernes, 8 de junio de 2012

evitar la psividad y condescendencia con las drogas previene LTD en valioso texto para tener presente a la hora de luchar contra la aberración


Una serie de noticias ampliamente difundidas durante los últimos días en los principales medios de comunicación, aunque opacadas por otros acontecimientos más vistosos pero no más importantes, ha vuelto a llamar la atención sobre un fenómeno que en nuestro país ya ha dejado de ser excepcional para incorporarse a la rutinaria actividad cotidiana. Nos referimos a la multiplicación de casos que dan cuenta de la enorme magnitud que han alcanzado las actividades directa o indirectamente relacionadas con el narcotráfico.
Desgraciadamente, que eso sea así, y que también sea bien sabido todo lo que eso significa, no parece suficiente para provocar una reacción colectiva proporcional al problema. Es que ni en las más altas esferas gubernamentales, locales, círculos intelectuales, empresariales ni políticos, se ven señales que refuten la sospecha de que nuestra sociedad, de manera lenta pero continua, está cayendo en una actitud condescendiente, cuando no tolerante, con todas las actividades relacionadas con la elaboración y comercialización de drogas.
La manera ya desembozada como no sólo las autoridades sino el grueso de los habitantes de poblaciones que, como Yapacaní, ocupan un lugar principal en la geografía de la droga, es sólo un ejemplo de lo dicho. Y éste, como otros casos similares que han salido a la luz pública durante los últimos días, dista mucho de ser una excepción pues, como es bien sabido, ya es gran parte del territorio nacional la que puede ser considerada como una fracción de la geografía del narcotráfico.
Para comprender la magnitud del peligro que tal fenómeno entraña no tendría que ser necesario nada más que un recuento de los casos de violencia ligados al negocio de la droga que con creciente frecuencia salen a luz como la punta de un iceberg que apenas deja entrever su real magnitud. Pero si eso no fuera suficiente, se podría hacer un esfuerzo para extraer lecciones de experiencias ajenas como Colombia o México, e incluso toda Centroamérica, donde los efectos destructivos de las actividades delictivas ligadas al negocio de las drogas ya se miden en términos de cientos de miles de desapariciones, secuestros, torturas y muertes.
Afrontar este problema no es algo fácil ni que corresponda, por lo menos no exclusivamente, a las autoridades gubernamentales, pues se trata de un asunto que por su propia naturaleza y magnitud excede con mucho las posibilidades reales de éste y cualquier gobierno. Si estados mucho más sólidos que el nuestro, como el mexicano, han podido afrontar el desafío sin sumirse en una guerra en la que llevan todas las de perder, no hay por qué suponer que un gesto de voluntarismo gubernamental sea lo más idóneo.
Es tan complejo el problema, que hallar una fórmula para enfrentarlo con alguna posibilidad de éxito es una tarea ardua. Que así sea, sin embargo, no debe ser motivo para justificar la pasividad ni la condescendencia, sino, muy por el contrario, debe ser un acicate para que el tema sea incorporado a la agenda pública nacional en un lugar de máxima importancia y por encima de los cotidianos conflictos que acaparan la atención colectiva.

martes, 5 de junio de 2012

Canciller de Colombia ha firmado acuerdo con Bolivia no sin antes reafirmar que carteles de allí se han asentado en Bolivia. Agencias noticiosas


La canciller de Colombia, María Ángela Holguín, advirtió este martes sobre la presencia de cárteles del narcotráfico en Bolivia y planteó una lucha conjunta para frenar su presencia, a través del trabajo bilateral de organismos de seguridad.

La representante del país vecino no quiso identificar nombres de estos grupos ilegales, aunque alertó sobre las consecuencias que acarrearía para el país su vigencia.

En las últimas semanas, en el departamento de Santa Cruz aumentó el índice de ajustes de cuenta, dejando un saldo de varias personas asesinadas. La Policía hasta el momento no consiguió esclarecer la cadena de hecho, pero sí manifestó que presumía de personas ligadas con el tráfico ilícito de drogas.

“Sabemos de la presencia del narcotráfico en Bolivia. Como colombiana me preocupa que nos estigmaticen como narcotraficantes. El colombiano es hombre bueno y trabajador. No quisiéramos que la imagen de Bolivia se distorsione. No sé decir exactamente quienes están, hay carteles de colombianos que están acá”, afirmó.

Holguín recordó que la lucha contra el narcotráfico en su país tiene efectos colaterales, debido más que todo por el desbande de grupos ligados al negocio.

“A veces el éxito nuestro es perjudicial para otros. Por eso estamos en una política de colaborar con los demás países. Nosotros queremos asumir con ese conocimiento e información que tenemos, para hacer eficiente en la tarea compleja en la lucha contra el narcotráfico”.

Acuerdo con Bolivia

Los gobiernos de Bolivia y Colombia firmaron hoy, un acuerdo de apoyo recíproco en las tareas de interdicción y lucha contra el narcotráfico, además de otras áreas.

La autoridad colombiana indicó que el acuerdo denominado “dos por dos” involucra labores de vigilancia y acción operativa.

“En diciembre estuve en Cochabamba. Queremos ayudar a Bolivia para evitar que los cárteles lleguen a este país, no queremos que sufran. Nos podemos reunir las veces que sea necesario. Colombia siempre estará lista para lo que ustedes necesiten”, afirmó.

El canciller boliviano David Choquehuanca enfatizó en la necesidad de consolidar el trabajo de apoyo a la lucha contra este flagelo.

“Por ello, tenemos desafíos comunes. El desafío del  dos más dos nos ayudará a encarar”, confió.

preocupante que Ichilo se esté convirtiendo en "el otro chapare" que ya acusa un bajón en producción agrícola por el incremento de la cocaína que lo perturba todo. San Germán y otros pueblos compran y venden cocaína en forma abierta


No quedan dudas que el noroeste cruceño, más concretamente la provincia Ichilo, ya se ha convertido en el “Nuevo Chapare”, el segundo centro de producción y tráfico de cocaína del país, con perspectivas de superar al trópico cochabambino, por algunas características especiales de esta región.

Se ha comprobado que en Yapacaní y San Germán, una vasta región de cientos de kilómetros cuadrados, el narcotráfico cuenta con la decidida protección de los habitantes. No tardarán en aparecer organizaciones sociales y líderes carismáticos con mucho arrastre popular dispuestos a sacar la cara por estas actividades e inmediatamente surgirá un discurso destinado a otorgarle un rostro social a lo que hoy es considerado un delito.

En realidad es la única característica que le hace falta. La provincia Ichilo está rodeada de parques y reservas naturales repletas de cocaleros que se han encargado de transformar la zona en un bunker impenetrable para la Policía. En menos de un año en la región se han destruido más de 250 fábricas de cocaína y además de comprobar que los cárteles internacionales de la droga han tomado posesión del lugar, casi no hay vivienda, familia o comunidad que no esté vinculada al negocio de la droga. La imagen de los agentes antinarcóticos usando explosivos de alto poder para destruir una pista de aterrizaje clandestina habla de la magnitud del problema. Días antes, una multitud les había impedido a los policías avanzar con sus operativos y tuvieron que pedir refuerzos.

Ichilo tiene algunas ventajas sobre su vecina Chapare. Está más cerca de los mercados de exportación de droga, tiene mejor vinculación caminera, mayor cobertura de servicios, grandes centros urbanos como Santa Cruz, Montero, Yapacaní y otros, que brindan un excelente apoyo con insumos, transporte, mano de obra, acopio y otros detalles de logística. La capital del departamento ha sido definida recientemente por un exjefe policial como la más importante sede del crimen organizado, donde operan bandas de sicarios y mafiosos extranjeros.

Esto actúa como acicate para la consolidación de lo que llamamos el “Nuevo Chapare”. Además de todo esto, en las inmediaciones de Ichilo no existen comunidades indígenas que puedan convertirse en un freno de la expansión de la economía de la coca y sus derivados, factor que ha dañado como ningún otro la imagen del trópico cochabambino y sus actores.

Y así como se arruinó la industria turística del Chapare y jamás pudieron prosperar en la zona, otros cultivos y actividades agroindustriales que no sean las relacionadas con la coca, toda la zona de influencia de Ichilo y con ella, la poderosa región productiva del norte de Santa Cruz, también se encuentran bajo amenaza.

Recientemente hemos conocido cifras que hablan de un bajón de la productividad (legal) de Santa Cruz, resultado del acoso político que sufre la economía regional. La realidad de prosperidad y lujo que se observa en las zonas de influencia del narcotráfico contradicen los datos estadísticos.

En San Germán, los pocos vecinos que todavía no se han mezclado con la narcoeconomía, comentan azorados cómo los pobladores, adultos y jóvenes, trafican con cocaína delante de todos y también guardan la mercadería en sus casas, sin ningún complejo. La zona se ha vuelto el mercado natural de los autos robados en Santa Cruz y la violencia crece sin control. Las consecuencias son imprevisibles si no se actúa pronto.
 
La provincia Ichilo está rodeada de parques y reservas naturales repletas de cocaleros que se han encargado de transformar la zona en un bunker impenetrable para la Policía. En menos de un año en la región se han destruido más de 250 fábricas de cocaína.

viernes, 1 de junio de 2012

profetiza Jimmy Ortiz "el narcotráfico será nuestra perdición", porque está visto que de manera más pronta que tarde, Bolivia sus cocaleros recibirán un castigo tal "que crugirán los huevos y explotarán las cabezas, como en el Apocalipsis...


() Noticia: Policías sufren hostigamiento en otro allanamiento a casa en Yapacaní  (El Deber 29-05-12).- Efectivos de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (Felcn) y su unidad de Umopar ingresaron nuevamente en el inmueble de narcotraficantes del barrio Nuevo Amboró, en Yapacaní, pero debieron soportar, por segunda vez, el hostigamiento de los pobladores de la zona.
() Comentario: La sociedad, el Estado y los líderes regionales cruceños, están subestimando lo que se viene. Miran para otro lado, pareciera que este gravísimo problema social no es con ellos, que sucede en otra región o en otro país.
Sin embargo el problema del narcotráfico se escala peligrosamente. Los narcos no duermen, nosotros sí. El apoyo inocultable del pueblo de Yapacaní a las mafias internacionales, es un signo por demás de preocupante, que no puede ya ser soslayado. La salud moral de nuestra sociedad está en peligro.
De Su Excelencia no tengo nada que decir. No espero nada de él. Su presidencia de las seis federaciones de cocaleros del Chapare y la pésima política antidrogas de su gobierno, hace ocioso cualquier otro comentario.
Pareciera que no estamos viendo lo que le pasa en esta materia a países hermanos, como Colombia y México, vicisitudes que tarde o temprano nos llegarán.
Lo de Colombia fue graficado patéticamente por el ex Presidente César Gaviria, y que tantas veces he repetido: “Los colombianos nos descuidamos, miramos para otro lado muchos años y cuando menos pensamos, el narcotráfico puso en jaque al país, las instituciones y la democracia y mató a dos candidatos presidenciales” (Ver link-> oem.com de México).
¿Esto es lo que estamos esperando que nos pase?
En México: “Dejan una cabeza humana sobre un auto con un mensaje para el Presidente Felipe Calderón. Más de 50.000 personas han muerto desde diciembre del 2006, cuando se inició un operativo antidroga en gran parte de México, la mayoría de ellas, según el gobierno, producto de pugnas entre narcotraficantes” (Ver link->america.infobae.com).
¿Esto es lo que estamos esperando que nos pase?
El mejor y más serio periodista de Bolivia, Don Pedro Rivero Mercado, dijo en su editorial, titulado Alerta roja en Yapacaní: “Yapacaní, la otrora pintoresca, pacífica y progresista población del norte cruceño, ha cambiado para mal en los últimos años desde su identificación como ‘zona roja’ del narcotráfico y a la que se considera parte de un vasto territorio comprendido entre Santa Cruz y Cochabamba, dominio de los cocaleros del Chapare y de los narcotraficantes” (Ver link-> eldeber.com).
En lo personal me canse de sugerir a los líderes institucionales y políticos de Santa Cruz la realización de una Cumbre Antidroga, desde marzo del año pasado. Evento que hubiera sido una buena forma de obligar al gobierno a tomar en serio este delicado tema, mostrado al mundo que somos una sociedad digna que no quiere convivir con esta lacra. Su efecto político y mediático pudo haber sido el punto de inflexión.
Incluso lo sugerí públicamente por los medios locales: El Deber, eju.tv, hoybolivia.com; nacionales: El Diario, Los tiempos, La Patria, El Potosí, El Nacional; internacionales: Analítica de Venezuela, El Morrocotudo de Chile, Informe Uruguay y CNN de EEUU (-> ver mi blog). Y todo fue en vano, “santo de casa no hace milagro”, como dicen en Brasil.
Cuando uno de los líderes quiso “considerar la posibilidad” de su realización, ya era tarde. Morales había firmado un convenio antidrogas con EEUU y Brasil (ver link-> eju.tv), sin nuestro control social, el timing había pasado. Nuestra miopía política es proverbial.
Es dramático el grado de indefensión de nuestra sociedad frente a éste flagelo. Si Evo no hace nada, las autoridades regionales tampoco y la comunidad internacional menos aún, solo Dios podrá salvarnos.
Dios salve a esta tierra, que lleva el nombre de La Cruz de Cristo y fue fundada en el nombre Del Padre, Del Hijo y Del Espíritu Santo.

no puede ser mas grave. coca a granel. vehículos de lujo robados en las ciudades. casas de fino acabado, deshabitadas...es decir toda una población dedicada a la cocaína. qué verguenza!


Vehículos último modelo, viviendas lujosas edificadas en medio de la selva y al menos 40 fábricas caseras de droga fueron dejadas abandonadas ayer por "narcopobladores" de la localidad de Nuevo Horizonte, ante operativos antidrogas que se iniciaron la madrugada del jueves.
Como si alguien hubiera alertado de los allanamientos, casi la mitad de sus pobladores asentados en los alrededores de la carretera principal que une Santa Cruz con Cochabamba dejaron desolados muchos de sus barrios luego que una veintena de vehículos "Lobos" de la Fuerza Antidroga armados ingresaron por sendas que conducían a por lo menos 40 fábricas caseras de drogas ante la mirada atenta de ciertos lugareños que se apostaron sobre la carretera.

Fabricas cercanas a la carretera. Lo curioso de los operativos ejecutados entre Umopares del puesto de control Bulo Bulo y la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico es que muchas de las zonas donde se elaboraba cocaína estaban a menos de 300 metros de la carretera principal, por sendas húmedas donde solo se podía ingresar con botas de goma.
Muchos de estos lugareños implicados en actividades de narcotráfico edificaron habitaciones precarias de madera donde guardaban cacerolas de aluminio, moldes de plásticos, trituradoras de coca que utilizaban para la purificación de la cocaína que luego era convertida en sulfato base, comentó el subcomandante nacional de la Felcn, coronel Wilfredo Montesinos, mientras su personal procedía a la incineración de todos estos utensilios.

Acopiaban su combustible. Los allanamientos demostraron que los narcolugareños guardaban gran cantidad de gasolina en turriles de plástico que posteriormente eran escondidos en zonas boscosas para evitar que sean descubiertos por la Policía.
En esta operación se decomisó y se quemó una significativa cantidad de gasolina que fue utilizada por los mismos agentes para la destrucción de fábricas caseras de droga. "Como pueden observar, estas personas traficaban droga ante la vista y paciencia de sus vecinos", comentó un teniente de policía que guardó reserva. 
Un sujeto que circulaba por una de las sendas fue encontrado con una bolsita de pasta base de cocaína por lo que fue arrestado y esposado en una de las camionetas de la Felcn.
 
Cerros de hoja de coca. Un lujoso inmueble ubicado a la salida de la zona de Nuevo Horizonte, el cual llamó la atención a los agentes antidrogas porque se encontraba desolado, cobijaba en la parte trasera de su enorme extensión una fábrica de droga donde se evidenció cerros de hoja de coca triturada y bastante combustible escondido en sendas boscosas. Se cree que esta fábrica elaboraba más de 50 kilos de droga semanalmente por su infraestructura destruida.
El jefe departamental de la Felcn, teniente coronel Fernando Amurrió, informó que en el primer día de la "Operación Tambaqui", dejó un saldo de 30 kilos de droga secuestrada, 91 fábricas y 175 fosas de maceración destruidas. Asimismo se decomisó 9.960 litros de gasolina, 61 libras de bicarbonato de sodio, 128.800 gramos de ácido sulfúrico y un total de 29 vehículos secuestrados de los cuales la mayoría se encuentran en el puesto de control antidroga de Bulo Bulo donde serán sometidos a microaspirado para determinar si eran usados para transportar sustancias controladas.
La hoja de coca secuestrada supera los 196 taques que llegan a pesar más de 9.800 libras. El fiscal de Montero, Basilio Vilca, informó que de los 20 detenidos en ambas operaciones cinco personas serán presentadas hoy (9.00) ante un juez cautelar en Santa Cruz, imputadas por tráfico de sustancias controladas.
Detalles
Combustible. Los pobladores escondían turriles de gasolina entre la maleza para evitar que la Policía se los incaute. Los uniformados tuvieron que meterse a zonas boscosas para secuestrar bastante material inflamable.
Incineración. Esta fábrica estaba ubicada a 200 metros de la carretera y tenía cerros de hoja de coca triturada materia prima usada para fabricar droga. Un contingente policial procedió a la destrucción de toda la factoría en pleno monte.
'Narcococina'. En este precario ambiente los narcolugareños purificaban cocaína para sacar sulfato base. Se encontró ollas de aluminio, cacerolas, moldes de plástico donde moldean la droga. Además de otros utensilios.
De lujo . Muchas viviendas con acabado fino quedaron deshabitadas. La fuerza antidroga cree que muchas de estas viviendas fueron construidas con dinero que generaba el narcotráfico en la zona de Nuevo Horizonte.
Siete vehículos con denuncias de robo
Las siete vagonetas Toyota Hilux secuestradas de la localidad de San Germán, en la provincia Ichilo, tenían denuncia de robo en la base de datos de la Dirección de Prevención de Robo Contra Vehículos (Diprove), según el fiscal Renzo Estévez. Los vehículos 4x4 fueron trasladados a Santa Cruz durante el megaoperativo policial encabezado por agentes antidrogas el pasado miércoles, bajo fuerte resistencia de los lugareños que se negaban a que los motorizados sean trasladados a Santa Cruz, derivando en un bloqueo momentáneo de la carretera principal por lo que la Policía tuvo que hacer uso de agentes químicos. "Unos tenía el chasis amolado, otros adulterados pero todos con denuncia de robo", resaltó el fiscal.
El jefe de Diprove, coronel Saúl García, invitó a las personas a reconocer sus vagonetas Toyota Hilux robadas las últimas semanas. García no quiso emitir comentario alguno de que en San Germán se estaría intercambiando vehículos Toyota Hilux por droga y se abocó a indicar que su unidad solo se dedica a desbaratar bandas de auteros y recuperar vehículos robados. En el cuartel de Bulo Bulo habrían vagonetas Noah que posiblemente tendrían denuncias de robo.