Los educadores y los padres de familia de Villa Tunari, Chipiriri, Eterazama, Isinuta e Isiboro Sécure, expresaron al arzobispo su preocupación porque los jóvenes de los colegios secundarios, salen a trabajar de noche en el tráfico de la cocaína.
Solari señaló que los pasajeros que vienen de Santa Cruz y “quieren comprar naranja o mandarina son rodeados por chicos que a las carreras se acercan para ofrecerles cocaína en bolsas plásticas”.
Aclaró que no es su competencia conocer indicadores cuantitativos de producción y erradicación de cocaína. Añadió que los padres se sienten impotentes en el control de los adolescentes que amenazan con abandonar sus hogares, porque tienen solvencia económica para hacerlo. La Fuerza Especial de Lucha contra el Narcotráfico de Cochabamba informó que el control está a cargo de la Unidad de Patrullaje Rural. Los asambleístas de Cochabamba pidieron investigar las denuncias.
No hay comentarios:
Publicar un comentario