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sábado, 28 de mayo de 2011

Severo y enérgico Los Tiempos demanda la atención al tema del narcotráfico que cada día es más alarmante reflejo de una realidad insoslayable

Entre soslayar el problema atribuyéndolo a supuestos afanes conspirativos o afrontarlo con la seriedad que merece es de esperar lo segundo
Una serie de notas periodísticas publicadas durante los últimos días han llamado una vez más la atención sobre el ritmo exponencial al que se está extendiendo en nuestro país el problema del narcotráfico. En esta oportunidad se lo ha hecho a través de una serie de reportajes que informan que en el Valle de Sajta, y de manera muy especial en los predios que en el trópico cochabambino tiene la Universidad Mayor de San Simón abundan las fábricas de droga.
Los datos que respaldan tales informaciones son por demás contundentes. Son el fiel reflejo de una realidad que por lo enorme y evidente que es de ningún modo puede ser soslayada. Menos aún en este caso, pues están sólidamente respaldados por informes de los fiscales del área, así como de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (Felcn) y la Unidad Móvil de Patrullaje Rural (Umopar), instancias estatales que están libres de toda sospecha sobre algún afán malintencionado de sobredimensionar el problema.
La alarma que tales datos provocan es por supuesto enorme, pero lo es mucho más si se considera que no representan un cuadro excepcional, sino sólo una fracción de un fenómeno que con características y magnitudes similares se está reproduciendo a lo largo y ancho del territorio nacional y ni qué decir internacional.
Ante ese cuadro, entre las fuerzas gubernamentales suelen reaccionar de dos maneras muy distintas. La una, que tiende a minimizar el problema con el argumento de que siempre fue así, que en otros países es peor o que son exageraciones difundidas por la oposición o “el imperialismo”. La otra, la más sensata, es la que con honestidad y valentía asume la magnitud del problema, lo reconoce como tal y busca la mejor manera de afrontarlo.
Con motivo de las informaciones que comentamos, las relativas al Valle de Sajta en ambas formas de reaccionar ante el problema se han manifestado con toda claridad.
Por una parte, el viceministro de Defensa Social, Felipe Cáceres, ha reconocido que, pese a sus muchos esfuerzos, el Estado no puede controlar extensas regiones del país donde el narcotráfico opera y que el Valle de Sajta, con sus 7.000 hectáreas, sería precisamente una de cinco regiones sustraídas por el narcotráfico al control estatal.
Muy diferente ha sido la reacción del gobernador de Cochabamba, Edmundo Novillo, quien ha optado por el recurso de minimizar el problema y atribuirlo a “intereses de carácter político que buscan magnificar lo que pasa para desprestigiar al país”. 
Es probable que en verdad, como dice el Gobernador cochabambino, haya quienes se solazan ante este tipo de informaciones creyendo que pueden plasmarse en algún rédito político, lo que denotaría una mala fe y una irresponsabilidad mayúscula pues ante un problema tan grave como éste no puede haber cabida para cálculos mezquinos. Por eso mismo, tan repudiable como eso, sería que se pretenda soslayar el problema en aras de una dudosa preservación de la imagen gubernamental.
Es por eso de esperar que en las filas gubernamentales se imponga la conciencia acerca de la magnitud del problema y que, en consecuencia, se acopie el valor que hace falta para enfrentarlo más allá de los cálculos políticos inmediatos, lo que incluye, indudablemente, el apoyo y compromiso de otras naciones que sufren problemas similares al nuestro.

jueves, 26 de mayo de 2011

en el Valle de Sajta conocido también como Ivirgarzama, se han encontrado 18 factorías de cocaína lo que pinta de cuerpo entero el narcorégimen que tenemos en Bolivia


En el Valle de Sajta (Ivirgarzama), en pleno trópico del departamento Cochabamba, las fábricas de droga están dispersas aproximadamente cada 20 metros.
En lo que va del año ya se han encontrado más de 180 fábricas en el lugar, sólo 14 en esta semana, y no hay ningún detenido.
En medio del monte del trópico, en las 6 mil hectáreas que tienen los predios de la Universidad Mayor de San Simón (UMSS), se han establecido los narcotraficantes y han instalado sus fábricas móviles de pasta base de cocaína, según se constató ayer luego de un operativo realizado por fiscales y agentes antidrogas.
Un operativo realizado  por cinco fiscales antinarcóticos,  al mando de Claudia Mancilla, junto al comandante de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (Felcn) y efectivos de Umopar evidenció ayer no sólo que las fábricas móviles de droga son cada vez mas sino que incluso los narcotraficantes, vuelven a usar los mismos lugares, pese a la intervención de las fuerzas del orden.
Fábricas que habían sido quemadas días antes del operativo, estaban ayer reutilizadas, y en algunos casos incluso aún salía el humo que produce el proceso de elaboración de la pasta base.
En otro de los sectores del Valle de Sajta estaban camufladas de manera muy hábil cinco bidones de combustible —utilizados como precursores— sumergidos en la laguna, cubiertas con una bolsa negra de nylon y, más adelante, en medio del agua, un bote volcado que suele ser la manera en que los narcotraficantes dejan a buen recaudo sus utensilios para su ilícita labor.
Uno de los agentes de Umopar —cuya versión fue luego confirmada por la fiscal Mancilla— aseguró que se habían encontrado huellas de barro en este lugar, lo que supone que los narcotraficantes estuvieron trabajando pocos minutos antes de que llegaran las fuerzas del orden.
Según la fiscal antinarcóticos, el problema está en que el acceso a estos lugares es muy difícil y existen cientos de entradas y salidas que son perfectamente conocidas por los narcotraficantes.
Para entrar al lugar donde se encontraron las fábricas de droga es necesario hacerlo con alguien que conozca las sendas y las rutas tanto de acceso como de salida. De lo contrario, señaló uno de los efectivos, uno podría perderse fácilmente y es muy peligroso, no tanto por los narcotraficantes sino por la misma agresividad de la naturaleza.
Las serpientes, las anguilas eléctricas y los lagartos son algunos de los peligros que acechan constantemente los alrededores de las sendas de los narcotraficantes.
Caminar en medio de las sendas del Valle de Sajta no es una faena que se deba emprender solo, recomiendan los efectivos de la Felcn.
“En realidad, los narcos nos observan desde que salimos de la base (es decir, el cuartel de Chimoré) y mediante los sistemas de comunicación de teléfonos celulares avisan a los que están el monte que estamos saliendo de operativo y para cuando llegamos sólo hay restos”.
Según la fiscal Mancilla, en lo que va del año no hay un solo aprehendido en los operativos, pese a la frecuencia que hay en los controles y acciones sorpresa de rastrillaje de fábricas. “Lo que usan es el método colombiano para la instalación de sus fábricas”, señala el comandante de Umopar, y explica que para ello sólo necesitan de una hora para armarla y 40 minutos para desarmarla.
La cantidad de droga que se logra hacer en una noche de trabajo es aproximadamente de 1 a 3 kilos de pasta base, para lo cual se requiere de más o menos 350 litros de precursores, los cuales pueden reutilizarse.
Lo que se halló en las fábricas móviles del Valle de Sajta fue enormes cantidades de hoja de coca molida, regadas en medio del monte, junto a restos de latas, botellas de plástico y bolsas de comida, que fueron consumidas por las personas que trabajan en estas fábricas.
PROCESO FÁCIL
Para la elaboración de pasta base de cocaína, que es lo que principalmente se elabora en el trópico, antes se necesitaban hasta seis personas que trabajaran toda la noche, elaborando pozos de maceración y combinando los precursores para obtener unos cuantos gramos de droga.
Ahora, con el método colombiano, no se necesitan más de tres, incluso dos personas, que con cemento, combustible y, por supuesto, hojas de coca molida, pueden elaborar hasta dos kilos de pasta base por noche.
Los narcos prefieren trabajar de noche, de ahí que durante el operativo de ayer las fábricas que se encontraron había varias linternas, pilas y campamentos.

miércoles, 18 de mayo de 2011

lunes 23 de mayo, hs. 10.00 a.m. tendrá lugar en la Fiscalía del Distrito de Miami el juicio contra René Sanabria general de policia que ocupó altas funciones en la lucha contra el narcotráfico



Juicio al narcogeneral Sanabria
Mauricio Aira

Cuatro días nos separan del 23 cuando el general de policías de la lista (pasivo o disponible) René Sanabria afrontará el juicio oral por el delito de introducir cocaína en territorio de los EEUU, delito que el Fiscal del Distrito de Florida Wilfredo A. Ferrer ha tipificado como violación titulo 21, secciones 963 y 952(a) en contra de René Sanabria Oropesa, Milton Sánchez Pantoja, Marcelo Foronda Azero y Jorge Sánchez Pantoja por conspiración e importación de cocaína y cuya detención formal ha tenido lugar el 2 de marzo, sin la presencia de dos de los nombrados.
En el comunicado de prensa de la Fiscalía de Florida se señala que el delito se ha producido al importar e introducir cocaína desde Bolivia a los Estados Unidos de acuerdo a información de las autoridades de la Aduana y de Protección civil consistente en cientos  de kilogramos al Estado de Florida y otros más de los EEUU, los imputados Sanabria y Foronda fueron arrestados el 24 de febrero y su primera comparecencia tuvo lugar el día 25. La noticia difundida desde Norteamérica provocó un tsunami  virtual en la Administración del Presidente Evo Morales, sacudida por los detalles de la detención que se fueron conociendo de a poco. Que Sanabria había estado en Chile en 2010 reunido con narcotraficantes (agentes encubiertos de la DEA) y recibido un pago anticipado de miles de dólares a cuenta del envío de 144 kilogramos vía un contenedor que se cargaría en Arica y desembarcaría en Panamá.
Transcurrido el tiempo llegó la cocaína al puerto chileno a bordo de un camión que cargaba un contenedor con minerales de zinc, la cocaína estaba camuflada con las bolsas metaleras y pasó el control de adunas tanto de Bolivia como de Chile. Cuando el narcótico llegó a Panamá paso obligado hacia EEUU donde debería ser descargada y entregada a los destinatarios que habían pagado por adelantado a Sanabria y uno de los hermanos Sánchez Pantoja ambos miembros igualmente de la Policía Boliviana en el puerto de Arica. Sanabria y Foronda esperaban allí en Panamá  fueron aprehendidos y la cocaína decomisada.
La reacción oficial demoró un par de días y se puede resumir: a) Sanabria ha caído en una trampa tendida por agentes chilenos sin dar parte a Bolivia., b) Detención de varios oficiales que trabajaban en la oficina de inteligencia dirigida por Sanabria y que pertenecía al Ministerio de Gobierno., c) Amago de detención de la esposa de Sanabria quién habría quemado documentos del general extraídos de una visita a su oficina. Hasta el día de hoy la mujer no ha sido hallada y menos identificados los documentos a los que prendió fuego., d) La policía no informó bajo qué cargos había detenido a los oficiales por lo que no se sabe si fue para evitar su detención por agentes de la DEA en el exterior y por tanto un mayor escándalo o para evitar que dieran a conocer detalles de la actividad de su jefe el narcogeneral relacionados con el narcotráfico.
Las críticas en contra del accionar de la Policía fueron creciendo de tono hasta que el comandante General Nina se vio obligado a renunciar y Evo Morales nombró a su sustituto coronel Ciro Farfán al que otorgó 100 días de plazo hasta limpiar la policía de corruptos.  A la fecha se han cumplido 80 y sólo restan 20 por lo que se estima que pudieran suceder dos cosas. 1. Que se presente un informe confesando la imposibilidad de deshacerse de los corruptos y que se necesita un plazo mayor para ello o 2. Que Farfán renuncie y se nombre otro oficial al que Evo encomendará similar tarea, pero sin fijar un plazo perentorio en clara señal de impotencia, como anticipó el ex vice ministro de Gobierno Torrico para quién la corrupción “está metida en la Policía que no bastarán 100 meses, ni 10 años sino 90 para limpiar la cadena de corrupción institucionalizada que existe”.  Por otro lado el General Comandante Farfán figura como principal sospechoso de haber “clonado” un vehículo de lujo sin placas que apareció aparcado muy cerca de su domicilio y que el funcionario negó pertenecerle.
Las reacciones del tsunami no han terminado, el Gobierno proclive a cerrar un ojo en materia de persecución al narcotráfico se ha esmerado en mostrar su cara fea a los narcotraficantes y ha estado bombardeando con noticias de haber desbarato la producción de cocaína en sendas factorías cuyas fotografías publica y los ladrillos de pasta base o de la misma cocaína y anuncia la detención de sus operadores, aún cuando los periodistas reciben la misma respuesta  “no damos el nombre de los detenidos para no interferir las investigaciones” cuando es bien sabido que el cuerpo del delito está ahí, pero no los delincuentes que parecen gozar de excelente salud. Tampoco asume medidas severas para reducir las plantaciones de coca, aunque proclama que los datos de NNUU, de los EEUU y de otros organismos están errados que la Administración ha cumplido su programa en demasía, pero que “evitará la existencia de coca en parques y reservas”.
Existe entonces una calma chicha a la espera de las revelaciones que hará Sanabria que se ha declarado inocente. De haberse declarado culpable habría podido forcejear por su libertad, al cerrarse las puertas podría delatar a sus cómplices y proclamar su inocencia, podrá también culpar a los agentes encubiertos de Chile y la DEA “me tendieron una trampa, pero juro que soy inocente” lo cierto es que está muy cerca de una condena de por vida, mientras tanto en Bolivia sus hijas han continuado percibiendo el sueldo de general del Policía conocido como “El Justiciero” de conducta muy rígida con sus camaradas, de cuya suerte muchos se alegraron y desde el Gobierno tampoco faltaron las excusas porque el narcogeneral le ocasionó, le ocasiona y le provocará muchos dolores de cabeza al atribulado jefe originario Evo Morales.




viernes, 6 de mayo de 2011

hace dos decenios publiqué dos artículos sobre la hoja de coca luego de sendas lecturas del sabio Sigmund Freud sobre sus bondades y luego sobre sus "consecuencias nefastas" La Prensa menciona al cáncer de coca.

La Prensa: ¿Coca cáncer?

Corresponderá a las autoridades de turno realizar investigaciones propias que puedan confirmar o desdecir los efectos nocivos de características oncológicas de la coca.
La hoja de coca, hoja sagrada de la cultura andina, propia de la tradición del acullico, según estudios oncológicos, es una fuente probable de cáncer en la boca. Tradicionalmente, una de las principales causales de este tipo de enfermedad ha sido el consumo del tabaco, advertido en personas ?fumadoras?. Es alarmante que el uso de la coca pueda conllevar un mal de esta naturaleza.
Respecto de las bondades de la hoja se han escrito innumerables artículos. En este espacio nos referiremos específicamente a la investigación llevada adelante por la Universidad de Harvard, en Boston Massachusetts de los Estados Unidos de Norteamérica, en 1975, denominado ?Valor nutricional de la hoja de coca?, que es representativo de la literatura existente sobre la materia. En dicho estudio, se hace referencia a que el consumo diario de 100 gramos de coca satisface la ración alimenticia de una persona y que con sólo 60 gramos se colma las necesidades de calcio en el organismo. A través de su consumo, el cuerpo obtiene potasio, se equilibran problemas cardiacos y hasta sirve de adelgazante. En pocas palabras, la coca podría definirse como una fuente de alimento y de medicina. Al ser un ?estimulante leve?, mejora la atención y puede compararse a la Ritalina, un remedio común en los Estados Unidos para tratar el síndrome de déficit de atención. Además, al ser ingerida en forma natural, no produce dependencias y tampoco generaría toxinas nocivas a la salud.
Con todos estos ?beneficios?, el acullico ha constituido históricamente, para las naciones aymara y quechua, una importante parte de la dieta, e incluso un vivificante utilizado para el mejor desempeño del trabajo. En consecuencia, no debería causar sorpresa que hasta el Ministro de Relaciones Exteriores y Culto del Estado Plurinacional de Bolivia haya propuesto a la Asamblea Legislativa que la hoja de coca sea incluida en el desayuno escolar en el país. En una declaración realizada el 22 de febrero de 2006, manifestó que ?nuestros niños necesitan calcio y la hoja de coca tiene más calcio que la leche, son afirmaciones de la Universidad de Harvard. Nuestros niños necesitan fósforo y la coca tiene más fósforo que el pescado?.
Si los estudios médicos modernos advierten la probabilidad de riesgos de naturaleza oncológica en su consumo, es importante preguntarse qué se conoce realmente de sus efectos secundarios. Sin duda que la misma, en el corto plazo, puede traer algún provecho. Sin embargo, si su uso en el tiempo puede motivar la generación de células cancerígenas, las personas deben tener cuidado y no abusar de sus benevolencias.
La hoja de coca ha sido asociada, muchas veces de manera indebida, como elemento esencial para la producción de cocaína, aspecto que ha conllevado a que parte de la comunidad internacional exija la erradicación de las plantaciones que no están destinadas a la usanza tradicional de la nación andina. Ahora, ante estos nuevos descubrimientos, corresponderá a las autoridades de turno, probablemente al Ministerio de Salud y Deportes, realizar investigaciones propias que puedan confirmar o desdecir los efectos nocivos de características oncológicas de la coca.

domingo, 1 de mayo de 2011

famoso autor inglés estima que Bolivia produce el 10% de la cocaína mundial. su libro "Cobra" se está vendiendo masivamente en competencia con obras de Vargas Llosa

"Cobra", la última novela del escritor británico Frederick Forsyth (foto), que narra la lucha que libra Estados Unidos contra el tráfico de cocaína proveniente de América Latina, se ha convertido en un éxito de ventas en Chile, dijo hoy el editor Gonzalo Eltesch, de Random House Mondadori.
Según se desprende del libro, un 10 por ciento de la producción mundial de cocaína corresponde a Bolivia, aunque casi toda la droga abastece la demanda de Estados Unidos o Europa, donde llega procedente de aeropuertos clandestinos de Latinoamérica y Centroamérica.
"Nada más publicarse en esta nación austral, el libro de Frederick Forsyth, un ex piloto de la Real Fuerza Aérea y periodista de oficio, tuvo un ascenso impresionante en sus ventas hasta convertirse en un verdadero ‘best-seller’", señaló a Efe Eltesch.
En opinión del editor, el hecho de que el autor británico se introduzca con gran habilidad narrativa en un tema sensible, peligroso y tan actual como el narcotráfico, generó en los lectores una avidez por leerlo que lo llevó en apenas tres semanas al primer lugar de ventas.
"Forsyth escribe sin retórica, directo al grano, con datos realmente impresionantes, y yo estimo que esa cruda realidad es la que está seduciendo a los lectores locales y de todo el mundo", subrayó Eltesch.
El autor de clásicos del thriller como "Chacal", "Odessa" o "Los perros de la guerra", ex piloto de la británica RAF y célebre por sus rigurosas investigaciones periodísticas, realiza en "Cobra" una concienzuda radiografía del tráfico de cocaína en la actualidad.
Forsyth crea en su novela a un implacable agente de la CIA retirado, enemigo de los políticos y del protocolo, que se enfrasca en una exitosa guerra que casi acaba con el narcotráfico.
Según datos de la Cámara Chilena del Libro, "Cobra" lidera el ránking de ventas de novelas de ficción, por delante de "El sueño del celta", el último libro de Mario Vargas Llosa.